Paper short abstract:
Este trabajo se aproxima a las ideas de los indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta sobre los cataclismos. En el caso específico de los I´ku (uno de los grupos serranos), contrario a la idea de un “punto final”, el exterminio de nuestra especie no implicaría necesariamente el final del mundo.
Paper long abstract:
A inicios de la década de 1990, los Kogi (grupo indígena de lengua Chibcha que habita la Sierra Nevada de Santa Marta, Colombia), movilizaron su mensaje de preocupación en uno de los medios de mayor alcance mediático de la época (BBC TV). El suyo era un claro mensaje de advertencia: si los no indígenas seguían viviendo como lo hacían, el mundo iba a acabar. 20 años más tarde, buscaron al mismo productor, Alan Ereira, con una pregunta: si ellos ya habían mandado el mensaje, ¿por qué los no indígenas seguían empujando el mundo hacia el fin?
Los indígenas serranos asumen para sí la primogenitura entre todas las sociedades y, en consecuencia, asumen el lugar y las responsabilidades de “hermanos mayores”, entre ellas, trabajar activamente para garantizar la continuidad de la existencia. El proceso principal para garantizar dicha continuidad es la realización de ofrendas (referidas comúnmente como pagamentos). En esta ponencia me intereso por la idea de equilibrio que éstas buscan.
Corrientes de pensamiento contemporáneo asumen que el caos climático, ecológico, tecnológico, económico, social, entre otros conlleva a un cataclismo sin precedentes que nos encamina al fin de la humanidad y, con ello, al fin del mundo. La búsqueda serrana por el equilibrio busca garantizar la continuidad de la humanidad y de aquello que conocemos como “nuestro mundo”, pero poniendo en jaque nuestra propia idea de humanidad, expandiéndola y tensionándola para fuera de nuestra especie, fuera del ámbito de lo biológico.